Un seguro temporal es un tipo de seguro que proporciona cobertura por un período específico de tiempo, que puede variar desde unos pocos días, hasta varios años. Este tipo de producto asegurador se adapta a las necesidades de cada asegurado y existen diversas situaciones en las que es recomendable su contratación:
El comienzo de un nuevo año es inspirador de buenos propósitos, es momento para plantearse el reciclaje profesional y la ampliación de conocimientos, no solo para mejorar en nuestro trabajo, sino en otros aspectos relacionados con el crecimiento personal. Las escuelas de formación presentan nuevos programas y temarios formativos, las academias impulsan nuevas actividades y los cursos de formación dan su pistoletazo de salida. Por su puesto, entre las obligaciones de escuelas y profesionales se encuentra, sin duda, la de garantizar que sus alumnos desarrollen las actividades propuestas de forma segura, ya sea en sus instalaciones o en el exterior.
Las luces de Navidad inundan las calles de las ciudades y los pueblos. Los mercadillos navideños ya están instalados en todas las plazas y son visita obligada para grandes y pequeños. Estos eventos tan señalados, que dan cobijo a las castañeras, a los puestos que venden los adornos para la casa, tiendas de bromas y souvenirs, exposiciones de belenes y un buen número de artistas callejeros, son el foco de las aglomeraciones que en estos días se dan en todas las ciudades.
El buen tiempo hace semanas que ya está aquí y las escuelas recompensan el esfuerzo realizado por los alumnos con salidas fuera de las aulas. Para los más pequeños es uno de los momentos más excitantes del curso, sin embargo, para los profesores y para los colegios y centros educativos puede llegar a ser un momento de máximo estrés. Garantizar la seguridad de los más pequeños es imprescindible y un entorno externo lo hace más difícil. Además de tomar todas las precauciones necesarias y planificar con detalle la salida, es necesario tomar otro tipo de medidas, puesto que siempre existe la posibilidad de que pueda surgir un imprevisto.
Llegan el buen tiempo y las ganas de abrir las puertas de las aulas y respirar aire fresco. Los campamentos son una de las mejores actividades para que los alumnos puedan aprender en la naturaleza lo que no es posible experimentar en recintos cerrados y, además, son una gran oportunidad para los emprendedores y empresas que quieran desarrollar proyectos de tipo formativo y lúdico.
La evolución positiva de los datos relativos a la Covid-19 ha permitido a las autoridades sanitarias ser mucho más permisivas con los aforos en los recintos destinados a la celebración de eventos, llegando en algunas comunidades autónomas, incluso al cien por cien. Para garantizar que la celebración de eventos, conciertos, festivales y otras expresiones culturales y de ocio, vuelven con toda seguridad, es importante, además de garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias exigidas, que los espacios y los profesionales que intervienen en el desarrollo de la actividad, cumplan con los seguros exigibles para su desarrollo.
La época estival es tiempo para disfrutar del aire libre, de relajarse y dejarse llevar. Los más pequeños disfrutan de sus vacaciones y los adultos, en ocasiones nos embarcamos en alguna que otra aventura que durante los meses de más trabajo no nos podemos permitir. Sin embargo, no hay necesidad de hacerlo asumiendo ningún riesgo. La seguridad es la clave para que toda la familia pase unas vacaciones inolvidables.
Cuando llega el verano, y ante la problemática de las vacaciones escolares, muchos padres optan por inscribir a sus hijos a un campamento de verano. Pero, la elección sobre el tipo de campamento y de proveedor no es sencilla. ¿Qué seguro para campamentos de verano debe contratar el organizador? Las variables que más debemos valorar son la naturaleza de las actividades, el prestigio de los organizadores, las pólizas de seguro contratadas y el precio. Para las empresas organizadoras, contar con una póliza combinada de campamentos RC y accidentes es clave.
La llegada del buen tiempo y el fin de las restricciones han renovado las ganas de salir y de compartir momentos y experiencias tal y como hacíamos hace tan solo algunos meses. La actividad cultural y de ocio, así como los eventos y los campamentos y actividades para los más pequeños están comenzando a reactivarse. Para poder disfrutar del tiempo libre bajo los más estrictos parámetros de seguridad es importante saber con qué tipo de pólizas deben contar las empresas o asociaciones organizadoras para garantizar que, además de divertidas e interesantes, todas estas actividades propuestas son completamente seguras.
La organización de eventos es una actividad compleja que requiere la conjugación de muchos factores: alquiler de espacios, gestión de asistentes, contratación de distintos proveedores… Pero sin duda, una de las principales tareas que deben acometer los profesionales de este ramo es la contratación de un seguro que pueda hacer frente a los posibles riesgos y daños a terceros que puedan surgir, de lo contrario, la empresa organizadora podría tener que hacer frente a los posibles daños materiales y personales que puedan darse tras un siniestro.
