Algunos ejemplos de empresas constituidas mediante la forma de sociedad civil serían ONGs, instituciones de beneficencia, sindicatos, asociaciones de trabajadores, clubes deportivos regionales o locales, centros docentes privados, colegios privados, etc.
En el mundo empresarial contemporáneo, la seguridad y la estabilidad de las empresas son cruciales para garantizar su éxito continuo. Tanto las organizaciones como los profesionales que actúan por cuenta propia, se enfrentan a multitud de riesgos en el desarrollo de su actividad profesional que, en ocasiones, ni siquiera tienen contemplados.
El trabajo que realizan los profesionales y las empresas que dedican su actividad a la obra pública impactan directamente en la calidad de vida de los ciudadanos. La forma en la que los ciudadanos conviven en los espacios comunes de las ciudades, las infraestructuras de transporte, los proyectos de saneamiento y energía… son algunos de los proyectos en los que participan estos agentes y que determina la fisionomía de las ciudades y los entornos.
En Berkley España nos especializamos en soluciones aseguradoras para profesionales y empresas que necesitan un servicio de alta calidad y un producto con amplias coberturas, adaptado a sus necesidades. Para garantizar que la solución que ofrecemos a cada empresa o profesional es el que mejor responde a sus necesidades, nuestra estrategia comercial está basada en la colaboración de una seleccionada red de mediadores expertos y altamente cualificados que ofrecen a todos y cada uno de los clientes un asesoramiento de calidad.
En una sociedad cada vez más compleja y en constante cambio, las organizaciones tienen que hacer frente no solo a los riesgos y exigencias tradicionales del sector en que operan, sino también a las nuevas demandas que la sociedad del siglo XXI impone y que se extienden a ámbitos hasta hace poco intranscendentes para el éxito y la supervivencia de las entidades. La transformación operacional y digital se ha convertido en un imperativo para cualquier organización que anhela una evolución próspera de su negocio a presente y futuro.
El otoño comienza a dar sus primeros pasos y la vuelta a la actividad supone un nuevo reto para profesionales y empresas. El desafío económico es grande en este periodo del año, sin embargo, como en cualquier aspecto del mundo empresarial, la precaución y la planificación adecuada son esenciales para garantizar el éxito y la seguridad a largo plazo. Una parte fundamental de esta preparación incluye asegurarse de que el negocio cuente con las herramientas adecuadas para garantizar la seguridad patrimonial del negocio.
La seguridad de los empleados es una de las principales premisas de las empresas a la hora de desarrollar su actividad. Analizar y poner al alcance de los trabajadores todas las herramientas necesarias para paliar los riesgos debe ocupar un lugar relevante en todos los planes de negocio de las organizaciones, sin embargo, las posibilidades de que se produzca un imprevisto de mayor o menor gravedad son reales e impredecibles.
La industria cosmética en España es uno de los sectores al alza. Según los últimos datos de la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, Stanpa, se trata de un mercado de 8.200 millones de euros, con una tasa de crecimiento anual que rozaba el 8% en 2021.
Algunos profesionales desempeñan actividades que se rigen por una normativa concreta y unos requisitos muy rigurosos, ya que sus decisiones pueden tener grandes consecuencias humanas o materiales en el caso de que ocurra un siniestro. En este grupo de profesionales pueden enmarcarse los que desarrollan su actividad en sectores como el minero, forestal, la obra pública o civil, la geología, o los ingenieros de caminos, etc.
En los planes de negocio de cualquier empresa es imprescindible contemplar los riesgos que esta pueda correr: riesgos económicos y patrimoniales, personales, materiales o de cualquier otra índole. Contar con las herramientas necesarias para prevenir cualquiera de estos imprevistos debe estar en la hoja de ruta de todas ellas.
